Claves para eliminar condensaciones con Pinturas Blatem

Las condensaciones son uno de los principales problemas relacionados con la humedad que se pueden dar en los hogares. Esta patología generalmente surge a causa de un mal aislamiento térmico exterior y, aunque puede resultar muy molesta, la parte positiva es que tiene solución. En este artículo profundizamos en esta problemática y te damos toda la información que necesitas para terminar con ella.

¿Qué son las condensaciones y por qué surgen?

Una condensación es el cambio de estado de una sustancia que inicialmente se presenta en forma de vapor y tras la transformación pasa a ser líquida. Por tanto, las humedades por condensación se producen cuando el vapor de agua que hay en el ambiente se condensa y pasa a mostrarse en forma de gotas de agua. Este tipo de humedad se produce habitualmente en el momento en que el aire entra en contacto con una superficie cuya temperatura es inferior al punto de rocío de ese aire. Por poner un ejemplo práctico, si el punto de rocío de nuestra vivienda se sitúa en 18 grados centígrados, el vapor de agua que hay en el aire de nuestra casa se condensará siempre que entre en contato con una superficie que se encuentre a 18 grados o menos.

Este fenómeno es, por ejemplo, el que ocurre cuando nos duchamos y aparecen gotas de agua sobre los cristales de las ventanas y los espejos, pero también se puede manifestar de una forma mucho más molesta: a través de manchas de moho en las paredes interiores de la vivienda, concretamente alrededor de los puntos más fríos de los cerramientos. Estas manchas no solo suponen un deterioro estético para la vivienda, sino que condicionan tanto la higiene como la salubridad de la casa.

Una vez entendido qué son las condensaciones, es importante conocer cúales son los motivos que provocan la aparición de estas. Estos son los principales:

1. Debido a un aislamiento deficiente: A menudo, la envolvente de los edificios, sobre todo de aquellos anteriores al CTE (Código Técnico de Edificación) presenta problemas de aislamiento térmico causados por los puentes térmicos. Estos son especialmente frecuentes en ventanas (el aluminio es un material muy conductor) y en torno a piezas estructurales metálicas o de hormigón, como los pilares o las vigas, que actúan como puentes térmicos respecto a la albañilería. Estas estructuras transmiten mejor el calor provocando pérdidas térmicas y episodios de condensación frecuente.​

2. También pueden surgir como consecuencia de una escasa ventilación del hogar. De hecho, la sensación de humedad es evidente cuando no ventilamos una habitación en mucho tiempo.

3. Problemas asociados a los sistemas de calefacción y refrigeración de la vivienda.

4. Como consecuencia de ciertas actividades diarias. El vapor de agua generado en los baños de agua caliente o la humedad provocada cuando secamos nuestra ropa en una habitación también pueden provocar condensaciones en la pared.

¿Cómo se manifiestan las condensaciones?

A pesar de que el origen sea el mismo (un mal aislamiento térmico exterior), las condensaciones pueden manifestarse de diversas maneras:

• Moho u hongos en las paredes que se muestran en forma de manchas negras.

• Aparición de moho en la ropa y calzado, especialmente en las prendas de cuero.

• Condensaciones de agua en las ventanas y alrededor de estas.

• Intenso olor a humedad generalizado por toda la vivienda.

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¿Cómo se evitan las condensaciones?

Evidentemente, hay algunas causas de la humedad por condensación que tienen fácil solución. Tan solo hace falta modificar ciertos hábitos diarios como, por ejemplo, ventilar la casa todos los días durante 10 o 15 minutos. Sin embargo, cuando hablamos de aspectos estructurales o asociados a los materiales constructivos de la vivienda el problema es mucho mayor. Ante estos síntomas se debe realizar un estudio técnico de la fachada que nos ayude a identificar y saber cómo evitar cada uno de los puentes térmicos. Tan solo de esta forma encontraremos una beuna solución para evitar la humedad por condensación. 

En este sentido, en Pinturas Blatem disponemos de varias soluciones que pueden funcionar a la hora de combatir dicha problematica:

• Aplicar un sistema de aislamiento térmico exterior (SATE): se trata de un aislamiento uniforme que se fija y ancla en toda la envolvente del edificio con materiales altamente aislantes como, por ejemplo, el poliestireno expandido. En Blatem tenemos nuestro propio sistema SATE conocido como Sateffic.

• Utilizar un revestimiento acrílico o mortero sobre la fachada exterior: esta puede ser una buena solución ante humedades por condensación leves e incipientes. A la hora de decantarse por este remedio es interesante que los revestimientos cuenten con conservantes antimoho para evitar su reaparición. Además hay que emplear pinturas con amplio relieve, capacidad impermeable, transpirables y de muy buena cubrición. Pinturas Blatem tiene muchos años de experiencia en el desarrollo y distribución de estos productos, con soluciones ampliamente reconocidas dentro del sector como Mar Liso con Conservante Antimoho o Sprint Mate con Conservante Antimoho. Cuando hablamos de morteros, la serie Torval ofrece distintos acabados granulados y de gran calidad en función de cada necesidad.

• Ante patologías más concretas que afectan puntualmente al aislamiento exterior (hablamos de grietas o fisuras) lo ideal es utilizar selladoras como el Fijador Sellador Acrílico de Blatem o impermeabilizantes elásticos como Sprint Elástico Antimoho o Sprint Antifisuras con Antimoho.

• En el caso de las paredes interiores, podremos tratar las humedades por condensación existentes con un tratamiento de impermeabilización. En este caso utilizaremos la pintura termoaislante anticondensación.

¿Necesitas más información sobre cómo eliminar las condensaciones en tu hogar? No dudes en ponerte en contacto con Pinturas Blatem, siempre estaremos dispuestos a ofrecerte el remedio más eficaz gracias a nuestro amplio catálogo de soluciones para la edificación.